Se acabó el "tu palabra contra la mía": Por qué celebro el nuevo Decreto de Autoridad Docente
Por: Juan José Fuster. Consultor Educativo
Como consultor educativo, mi trabajo habitual es analizar normativas, optimizar la gestión de centros y formar equipos directivos. Pero hoy, al leer la aprobación del decreto que desarrolla la Ley de Reconocimiento de Autoridad del Profesorado (aprobado ayer, 16 de diciembre), no puedo escribir solo como analista. Tengo que escribir como el director que fui.
Y lo digo alto y claro: ya era hora.
Esta noticia es un bálsamo personal. Quienes me conocéis de mi etapa en la dirección sabéis que sufrí en carne propia lo que significa la indefensión. Recuerdo el horror —porque no tiene otro nombre— de ver cómo mi palabra, tras años de servicio y profesionalidad, era puesta en duda sistemáticamente.
He vivido reuniones donde yo relataba hechos objetivos ("esto es lo que he visto") y me encontraba frente a padres y alumnos que, con total frialdad, decían que yo mentía. Y lo peor no era el insulto, sino que el sistema me obligaba a tratar ambas versiones como equivalentes. Esa injusticia, esa sensación de que el profesional tiene que defenderse por hacer su trabajo, es lo que este decreto viene a erradicar.
Desde mi perspectiva técnica y humana, analicemos por qué este cambio legislativo es la mejor noticia del curso 2025/2026.
1. El fin de la indefensión: La Presunción de Veracidad
Este es el punto que más habría cambiado mi vida como director. El nuevo decreto establece, sin lugar a dudas, que la palabra del docente tiene valor probatorio.
* Lo que viví yo: Un desgaste infinito acumulando pruebas para demostrar que no me inventaba las faltas de respeto.
* Lo que dice la ley ahora: En los procedimientos disciplinarios, los hechos constatados por el profesorado gozan de presunción de veracidad. La carga de la prueba se invierte. Si una familia dice que "el director miente", ahora son ellos los que tienen la obligación legal de demostrarlo.
2. Blindaje Legal y Psicológico
Durante años he visto a compañeros (y a mí mismo) gestionar denuncias falsas o campañas de desprestigio en soledad, pagando abogados de nuestro bolsillo y sufriendo ansiedad en silencio.
El nuevo texto obliga a la Administración a:
* Prestar asistencia jurídica gratuita inmediata.
* Ofrecer apoyo psicológico ante situaciones de acoso o violencia (incluyendo el ciberacoso, esa lacra invisible).
Ya no es un problema privado del docente; es un problema del sistema, y el sistema responde.
3. Agilidad frente a Burocracia
Como consultor, siempre repito que la burocracia mata la autoridad. Si tardas dos semanas en sancionar una agresión porque el papeleo te asfixia, el mensaje que das al alumno es de impunidad.
Este decreto faculta a los docentes y directores para tomar medidas urgentes (como la expulsión inmediata de la clase o del centro) para restaurar la convivencia. Se prioriza el derecho del grupo a aprender sobre el derecho del individuo a boicotear.
Conclusión de Consultor: ¿Y ahora qué?
A los equipos directivos que asesoro les digo hoy lo siguiente: actualizad vuestros Reglamentos de Régimen Interior (RRI) ya.
Esta ley es una herramienta poderosa, pero hay que saber usarla. No se trata de volver al autoritarismo rancio, sino de recuperar la dignidad profesional. Se trata de que, la próxima vez que un director diga "esto ha ocurrido", no tenga que soportar el horror de ser tratado como un mentiroso en su propia casa.
La autoridad no se impone, se gana. Pero es un alivio saber que, por fin, la ley ha dejado de remar en nuestra contra.
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